Si, has leído bien, existe un perro que no ladra, y se trata del basenji, la única raza del mundo que no tiene la capacidad física de ladrar.
El motivo por el que no ladran es debido a la postura de su laringe y a la estructura de sus cuerdas vocales, que son más estrechas y planas que las del resto de perros. En cambio, si que son capaces de emitir un sonido muy curioso reconocido como Canto a la Tirolesa, donde el perro cambia bruscamente entre el tono grave y aguo con la sílaba ‘jo’.
Historia de la Raza
Se trata de una de las razas de perro más antiguas que existen hoy en día. Sus primeras evidencias datan de hace más de 5000 años en el Antiguo Egipto, ya que todavía pueden verse jeroglíficos que señalan la existencia este tipo de perros.
Su origen, sin embargo, se remonta a África Central, en la tribu de los Bashingi, cerca de la zona conocida hoy en día como la República Democrática del Congo. Se cree que llegó a Inglaterra en torno al 1895 y a partir de ahí se extendió por Europa y posteriormente a Estados Unidos.
Su pasado es, sobre todo, de perro de trabajo y caza, de hecho, se cree que antiguamente cazaba leones, ya que, gracias a su tamaño, son perros muy ágiles capaces de dar saltos verticales. Hoy en día es un perro domesticado, pero es cierto que en algunos lugares de África se sigue utilizando para cazar animales pequeños.
Carácter
Normalmente se compara a los Basenji con los gatos, ya que, igual que los felinos, son perros que les gusta estar limpios y por esto se acicalan ellos mismos el cuerpo. Además, también son animales independientes, testarudos, astutos, y cuando le apetece, afectuosos.
Se lleva bien con otros perros y le gustan mucho los juegos de habilidad mental, ya que es un perro sumamente inteligente.
Además de no ladrar, son perros ciertamente curiosos, ya que no huelen a perro, las hembras tienen el celo una vez al año en vez de dos, e independientemente del color, siempre tendrán las patas delanteras y traseras blancas.