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Características del bichón maltés

  • Talla → pequeño, mediano
  • Peso → 3 – 4 kg
  • Altura → 20 – 25 cm
  • Esperanza de vida → de 12 a 15 años
  • Clasificación FCI → Grupo 9, sección 1

Introducción a la raza: el bichón maltés

Blanco como la nieve, pequeño, juguetón e inteligente. Solo con estas características la raza de perro Bichón Maltés enamora y entusiasma a cualquier amante de los animales. Es un animal optimista y un perfecto compañero para toda la familia. Su carácter de cachorro juguetón le acompaña toda la vida y siempre se muestra alegre y dispuesto a seguirle el juego a los niños.

Origen del bichón maltés

A pesar de su nombre, el origen de esta raza no está en la isla de Malta. Los ancestros de este pequeño perro vivían en los puertos y las ciudades costeras del Asia central, donde cazaban a los ratones y las ratas que se encontraban en los almacenes de los puertos y en las bodegas de los barcos. Alrededor de los siglos XVII y XVIII, la raza casi desapareció y fue cruzada con otros perros pequeños como los caniches y los Spaniels miniatura. En el siglo XIX, hubo hasta nueve diferentes razas de perro maltés, pero el actual estándar de la FCI se aprobó el 27 de noviembre de 1989.

Actividad física recomendada

Al ser pequeños no precisan de mucho ejercicio, por lo que dos paseos diarios de 15 minutos serán suficientes para cubrir sus necesidades.  Esto los hace buenos candidatos para personas mayores. Lo que sí necesitan, sobre todo si es cachorro, son los juegos. Son muy activos en el interior de casa y grandes aficionados de los huesos de goma y de los juguetes en general. Tienen una energía ilimitada que requieren liberar.

Carácter del bichón maltés

El bichón maltés es muy sociable y educado, pero también inteligente y cariñoso. Es un perro protector de la casa, lo que permite utilizarlo como perro alarma, como el chihuahua o el yorkshire terrier. No presentan problemas con los niños, siempre y cuando, al perro se le respete y se le eduque. Les gusta estar en compañía de su cuidador y no le resulta fácil estar a solas durante mucho tiempo. Es un perro que se adapta a cualquier tipo de vivienda y, por su reducido tamaño es ideal para vivir en un piso. Además, como no suele ser ladrador, excepto con extraños, la convivencia será muy tranquila y los vecinos apenas notarán su presencia.